El pasado miércoles, 21 de febrero representantes de OAT asistimos a «Casa Golferichs», como invitados a la Fila cero, al acto de “EL DERECHO HUMANO AL AGUA. Planificación, distribución y cambio de modelo”, organizado por La Fundació Sentit Comú.
La mesa redonda contó con la participación de Janet Sanz (Vicepresidenta de Acción Climática de la AMB.), que la moderó y dirigió, Jèssica Albiach (Presidenta dels Comuns en el Parlamento de Cataluña), Dante Maschio (portavoz de Aigua és Vida), Eva Vilaseca (Activista y portavoz de la Assemblea Catalana per la Transició Ecosocial) y el Narcís Prat, (Catedrático Emérito de Ecología). La sala-espacio del acto estaba muy concurrida, con la presencia del alcalde del Prat del Llobregat, como también otras personas conocidas como Salvador Milà, ex-consejero de la Generalitat en el periodo del tripartito, el Luis Basteiro del AMAP, entre otros.
En general, en todas las intervenciones, se hicieron patentes las denuncias de los ponentes, con los argumentarios pertinentes de todas las situaciones que en estos momentos de emergencia climática y sequía persistente, nos permiten estar mejor preparados, puesto que desde hace unos 20 años aproximadamente, no se han hecho las inversiones necesarias.
Se explicó que, ahora, y a pesar de ir muy tarde, sería la hora de llegar a grandes consensos políticos y sociales, que facilitaran las respuestas necesarias que pasan entre otras cuestiones, en la retirada de todos los macroproyectos (Hard Rock; ampliación del aeropuerto; La construcción de 250.000 viviendas durante los próximos 15 años al AMB; La continuidad del trazado de la B40. Etc.), proyectos todos estos que estan sobre la mesa, pese ser todos ellos insostenibles.
Así mismo, se informó que los Grandes operadores Turísticos, Sectores Industriales, que son grandes consumidores de agua como producto y valor de cambio mercantil de su cadena de producción, y de la Agro-industria, tendrían que entender que este camino de crecimiento continuo no es posible y por tanto se plantea un cambio de modelo aplicando una transición eco-social con un uso responsable del agua y distribución justa y equitativa. Este deseado consenso haría que hoy no sufriéramos las consecuencias que en gran parte en estos momentos estamos viviendo.
Se puso en evidencia que la eficiencia de distribución de agua en los municipios de Manresa, Mataró y El Prat de Llobregat es del 90% y todos ellos tienen una gestión pública de hace muchos años.
Queremos resaltar las intervenciones y aportaciones de Dante Maschio, que hizo un llamamiento a los principios del agua como derecho humano, bien común, ecosistémica y servicio público y plantea que la sequía tiene que ser como una oportunidad para recuperar herramientas de gestión públicas.
También aprovechó para poner el OAT, como ejemplo y modelo de participación ciudadana efectiva, que hace posible la transparencia, la fiscalización y rendimiento de cuentas, y que tiene como objetivo la coproducción de políticas de agua de forma consensuada, con la mejor garantía de gestión en la coproducción a tres bandas (operadora, administración y ciudadanía), en materia de políticas de agua.
La sequía es un problema colectivo. Necesitamos que las administraciones se identifiquen con un ecologismo democrático por el bienestar y tienen que saber animar a la ciudadanía en esta nueva cultura.